La Historia de «El Dodge 3700 GT» de Joe Strummer y su relación con Old Star.
“Volví tras el nacimiento de mi hija y olvidé dónde lo había dejado”. “Con matrícula de Oviedo, no puedo recodar exactamente, pero O de Oviedo, Oviedo”. “Señoritas, hermanos y hermanas, ¡amo ese Dodge!”. Joe Strummer
«Amo ese Dodge«
Para el que no lo sepa, el líder de The Clash, John Graham Mellor, más conocido como Joe Strummer, pasó mucho tiempo en España, concretamente en Andalucía. Era tanto su amor por nuestro páis, que llegó incluso a tener una segunda residencia en San José (Almería).
En sus idas y venidas por la península hispánica, le dieron muchas “venadas”, entre ellas cabe mencionar la de buscar la fosa común donde está enterrado Lorca, montarse una ferretería o subirse a todas las farolas a colocar lazos. Sin embargo, la más destacable era su obsesión por tener un Dodge. Fue Santiago Auserón (Radio Futura), colega de Joe, quien le consiguió el pedazo de carro americano a Strummer. Lo compraron a las puertas de la «Galería Buades» en Madrid. El problema es que Joe, un día mientras estaba de cervezas por Madrid, recibió el aviso de que acababa de nacer su segunda hija «Lola», y salió pitando para Reino Unido olvidando dónde había aparcado su flamante cacharro nuevo.
Varios años estuvo intentando recuperar su Dodge, sin éxito. Incluso en una entrevista-promo en Radio3, se dirigió a la gente en su característico castellano macarrónico, para pedir que le avisasen si veían el coche. “Yo aparcar el coche en un garaje, en centro madrid, un poco al este del centro, cerca de la Castellana”, “Con matrícula de Oviedo, no puedo recodar exactamente, pero O de Oviedo, Oviedo”.
“Señoritas, hermanos y hermanas, ¡amo ese Dodge!”.
Sin entrar en más detalles anecdóticos, existe un cojonudo documental de Nick Hall sobre este mismo tema. I Need a Dodge. Altamente recomendable.
Old Star y el Dodge de Joe Strummer
Es evidente que soy fan de The Clash, pero en cierta medida me considero más admirador de Joe Strummer, como personaje y músico, que de su propia música. Supongo que mucha gente me entenderá, incluso compartiremos el mismo sentimiento.
Entiendo también que al vulgo le puede resultar más fácil ser fan de un grupo como, por ejemplo, Metallica, que giran constantemente a nivel mundial, y no les resulte tan sencillo interesarte, como en mi caso, por una banda como The Clash, disuelta y con Joe Strummer fallecido. Para nosotros, los fans de grupos en estas situaciones, es mucho más complejo satisfacer nuestras inquietudes como entusiastas. Reitero que, como fan de Metallica, puedes verlos en directo cada dos o tres años y perfecto pero, ¿qué hacemos nosotros? Coleccionamos todos los libros, todos los discos, todas las putas ediciones especiales que salen cada aniversario… Todo para darnos cuenta que al final nada satisface más a un fanático que poder ver a su banda favorita en directo.
Por último, sin prolongar más esta divagación y volviendo a mi persona, como fan, os quiero explicar la razón de esta aparición estelar del coche de Joe Strummer en mi cómic. En esencia, todo se debe a la necesidad, como fan, de crear una cercanía con uno de mis ídolos. Así decidí adueñarme del desaparecido Dodge 3700 GT de Joe Strummer y regalárselo a Bitter Asmodeus, en el volumen número 2 de Old Star. Es mi humilde manera de homenajear a Joe. Obviamente, alabar su coche no es como ver a The Clash en el Shea Stadium en el 82, pero en el fondo es una manera de demostrar mi aprecio hacia uno de mis grandes ídolos.
El merchandising del Dodge
Aprovecho la situación para ofrecer el merchandising de Old Star: una camiseta salvaje con la viñeta del Dodge y la «Action Figure», «Lifesize» de las llaves que Joe le regala a Bitter. A fin de cuentas, sabes que un fan que se precie no puede dejar escapar estas perlas…
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